miércoles, 31 de marzo de 2010

La esperada Alicia



Fuí a ver "Alicia en el País de las Maravillas" de Tim Burton. Los primeros minutos fueron emocionantes: en la fiesta para conceder la mano de Alicia al antipatico y amanerado Lord, y luego ésta persiguiendo al conejo (elemento del país al que iría luego), hasta que cayó en la cueva y apareció en ese mundo colorido y disparatado donde la lógica estaba al revés.
Me deleité con cada personaje, la reina roja fué mi favorita, el sombrerero loco (excelente caracterización de Jhonny Depp),el gato sonriente, el conejo obsesionado con su reloj de cadena, los gemelos obesos y de pensamiento divergente, etc, etc.
Tim Burton nos tiene acostumbrados a mundos recargados y fantásticos. Lo malo fue que a partir de allí (sospecho que Walt Disney Productions fue la culpable)la película adquirió un libreto Holiwodense, rumbos trillados,la lucha entre el bien y el mal y la infaltable espada mágica que podría destruir al monstruo,el enfrentamiento entre Alicia y el dragon (profetizado) al final no me convenció.
Algo bueno es esa busqueda de identidad a que es puesta a prueba Alicia, y ese no recordar que ya estuvo allí, y que sus sueños eran tan reales como la "realidad".

Francamente esperaba una película más ilógica donde los personajes no sean tan maniqueos, sería mas sabroso artística e intelectualmente.
Ademas Alicia... siendo la creación de Lewis Carrol,un matemático, daba para más en cuanto a los juegos de lógica,que por supuesto son la base del libro.
Pero Tim Burton se ciñó mucho a los productores, nuevamente, perdió -como le dijo la oruga sabia a Alicia, la "muchocidad"- y no logró lo que hizo en otras de sus películas: esa perturbadora oscuridad de su personajes.

Cierto es también que la película está pensada y realizada para los niños, sobre todo, y cuando un filme lleva ese estigma vale decir que es para publico mas "visual" y menos "intelectual" (siendo maniqueo).
Al final pasé casi dos horas agradables pero fue como saborear una mera golosina, aunque claro,el cine también es eso.

martes, 30 de marzo de 2010

Algo sobre Odisea en el espacio


La piedra estaba en una planicie, un paralelepípedo solitario en el ocaso del sol, en el inicio de los tiempos. Un grupo de monos se aglomera ante ella, pero no se atreven a acercarse mucho, aunque uno de ellos, mas audaz, se acerca hasta la misma, y después de varios titubeos la toca, apartir de ese momento se convertiria en el lider...
Miles de años despues (dicen que es la elipsis mas grande de la historia del cine) una nave espacial tiene la misión de averiguar sobre una extraña señal que viene de una de las lunas de Jupiter. El cientifico Bowman es el encargado, pero la nave tiene una supercomputadora, la HaLL 2000 que es la que se encargará de que nada interfiera en la misión, ni siquiera el propio Bowman....
Llegar hasta los confines del sitema solar, encontrar la misma piedra de hace miles de años, traspasar puertas dimensionales, viajes hasta lo más recóndito.
Odisea del Espacio es una joya mística, una pelicula que nos lleva hacia los misterios mas grandes del universo, nos confronta con el origen y el fin de la especie humana.
Basada en la novela de Artur Clark, "El vigilante": seres inteligentes hace miles de años dejaron diseminados por el espacio a "vigilantes" máquinas que enviarían una señal en el momento de ser descubiertas por una civilización inteligente.

Sería un pecado perdersela, no por nada esta calificada como la película numero uno en el género de ficción científica.

La señal ya esta enviada, sólo queda esperar...

El Stalker y el titulo de este blog


Entré a la sala, tardé unos minutos en descubrir un asiento vacío, en el encuadre luminoso tres hombres que no hablaban iban en un pequeño vagón de tren y se turnaban para darle impulso con una palanca especie de sube y baja, el ambiente era nublado, brumoso, la mirada de cada uno era tensa, primeros planos perturbadores, y el paisaje que va cambiando a un bosque que va comiendo el espacio. Se bajaron, los tres hablaban de una "zona", habian llegado a la puerta de ese lugar donde el Stalker, especie de mezcla de chamnan con guia turistico los llevaba, antes hicieron un ritual amarrando piedrecillas en una soga y arrojándolas...
La zona concedía los deseos mas ocultos, pero tenia sus trampas y era peligrosa, capaz de desquiciar.
Basada en la novela "Picnic a la vera del Camino" de los hermanos Arkady y Boris Strugatski,una película genial de Andrei Tarkovski, la zona es un lugar donde se cree cayó un objeto extraterrestre y creó una inflencia poderosa.
Tarkovski nos tiene acostumbrados a los encuadres poéticos,la lentitud y camara que nos guía y nos hace fisgones de algun suceso que en cualquier momento puede suceder, nos encamina por las fuerzas metafisicas.
No perderse esta gran película.

lunes, 29 de marzo de 2010


Ese martes,a las ocho y cinco de la noche entré al cine de la universidad, proyectaban Ocho y Medio,no tenía idea de que se trataba pero entré como quien dice para "hacer hora", en la oscuridad tropecé con la primera silla, mi primera reacción al sentarme y ver la cara existencial de Marcelo Mastroiani fue irme, pero por algún motivo me quedé, tal vez por la belleza de Sofía Loren ; divagué con los tormentos de un director de cine (Mastroiani), por primera vez tome conciencia de la existencia de semejante profesión, y me identifiqué luego con su niñez marcada por el abrumador despertar sexual con la exuberante Saragina. Los payasos dando vueltas con esa música que pronto me hizo entrar en el mundo de los creadores de sueños. Al salir del cine ya no era el mismo, adquirí esa enfermedad inefable de los cinéfilos: SE PUEDE CREAR SUEÑOS, ESTO ES POSIBLE, GRACIAS MAESTRO FEDERICO FELLINI, GRACIAS MARCELO MASTROIANI, LARGA VIDA A LA VOLUPTUOSA SOFIA. No puedo hacer mas que tratar de propagar este virus.

el ultimo toque


Mientras miraba el Ultimo Tango... esa mano estaba quieta, fina, en la baranda de madera de esa anónima silla, era una mano amiga, una mano desconocida en realidad, pero que invitaba a acariciarla, una mano bella, de dedos largos, y el filme avanzaba mientras Marlon Brandon seducía a María Sneider y el corazón me estallaba al fundir la dimensión segunda con la tercera y posar mi mano sobre una mano desconocida.

He oído que la noche...

La noche con su fibra avanza serena, las luces ya se han encendido, como siempre, y vago por esta avenida de arboles desojados por la brisa de la estaciòn.
Avenida de sueños. Encuentro en el parque a los amigos que nunca tuve, libando y riendo, paso de largo para no interrumpir la soledad de ese desencuentro. Uno nunca sabe lo que sucederá. Cuando se ha logrado establecer una ley para algo, ocurre una cosa que desbarata todo el cálido sueño...
Sigo caminando, con paso preciso, para no salir del encuadre.

viernes, 26 de marzo de 2010

El Huayco


El joven volvía después de casi veinte años a la ciudad de Arequipa, allí pasó los años mas felices de su vida, ahora regresaba por motivos de trabajo. Llegó al aeropuerto y tomó un taxi que lo condujo al hotel, la ciudad luminosa de sus mejores años y el imponente volcán estaban allí, como en sus recuerdos más preciados. Al llegar al hotel “El Emperador” ya tenia su cuarto reservado, luego de dormir un rato decidió ir a pasear por la ciudad pues recién al día siguiente comenzaba su curso empresarial. Desde hace mucho tiempo atrás, Fabián quería regresar, pero el trabajo lo fue absorbiendo y postergó este viaje hasta que el destino hizo que todo se diera para ese ansiado retorno a la ciudad blanca. El tenía un recuerdo extraño y una duda que llevaba clavada en el alma, un misterio del que había sido testigo de pequeño y ahora veinte años después quería resolver.
Su padre era un ex trabajador de tejidos la Unión, fabrica que quebró en el gobierno de Fujimori debido a la libre importación de productos chinos. El vivía con sus padres en unas pequeñas casas construidas por la empresa textil. La empresa estaba construida en un pueblo llamado el Huayco ubicado a unos 15 km. de la ciudad, rio abajo, tenia varias etapas la primera al entrar al pueblo, luego la zona donde estaba construidos los edificios de la fábrica, en el fondo en la parte mas alejado y exclusiva las casas de los ingenieros y del gerente, construcciones al estilo inglés.
Fabián había pasado su infancia jugando en el río con Leticia, la hija del gerente. Su amistad al principio fue libre, jugaban en los diversos ambientes, en la zona de los rieles, en el sendero que va a dar a la quebrada y sobre todo en el cañón que formaba el río y en la que la empresa había construido una pequeña central hidroeléctrica.
Un día el padre de Leticia, entró a la sala de operarios habló con Andrés Álvarez el padre de Fabián, le dijo que si quería conservar su trabajo debía mantener alejado a su hijo de la niña. La noticia afectó mucho a los adolescentes pero pronto encontraron un medio de verse a ocultas todos los martes que su padre iba al la ciudad.
Bajo la complicidad de la madre de Leticia que era mas comprensiva se alejaban rio abajo hasta una zona poco transitada, era el punto donde el rio Chili se angostaba mas, los farallones a ambos lados daban imponencia al lugar. Cierto martes los muchachos se encontraron jugando tirando piedras al rio, Fabián las arrojaba lo mas lejos posible, de pronto observó con sorpresa que la piedra que acababa de arrojar lejos en una zona tranquila del rio nuevamente se encontraba en su mano. Varias veces volvió a arrojar piedras que luego de seguir el curso lógico, como todas, se hundían, pero cuando una de ellas caía a la “zona”, la piedra volvía la mano del muchacho. La “zona” era un lugar donde el rio se dividía en dos brazos al chocar con una inmensa piedra, el agua estaba calma allí.
Leticia quiso repetir la experiencia mas no tenia la fuerza necesaria para hacer llegar el guijarro hasta el punto misterioso. Los adolescentes decidieron guardar el secreto.
Pero Fabián se quedó pensando, era un muchacho curioso y cierto día en que probaban de nuevo el fenómeno de las piedras que volvían, remangándose los pantalones decidió llegar hasta el mismo lugar.
Por mas que Leticia le gritase y hasta llegase a tener un ataque de nervios, el seguía paso a paso, tambaleando al pisar piedras resbalosas y por la fuerza del rio.
Cuando faltaba poco para llegar al lugar, Leticia dio un grito desgarrador, Fabián giró la cabeza asustado, y regresó lo mas rápido que pudo donde Leticia que yacía en el pasto. Se había desmayado. Leticia al volver en si abrazó fuerte a Fabián, con lagrimas en los ojos le hizo prometer que no volviese a tratar de llegar a ese lugar.
Pasaron los meses y el padre de Leticia decidió que ella debía estudiar en Inglaterra. Los niños se encontraron por última vez en el riel y lloraron prometiendo reencontrase.
Y así pasó el tiempo hasta que la fábrica quebró por la llegada de los tejidos chinos más baratos y a los obreros se les dio una indemnización. Luego Fabián y sus padres se fueron a radicar a Lima, donde el muchacho estudio Ingeniería mecánica en la UNI . De Leticia no se supo nada.
Ahora Fabián hecho un hombre volvía a recorrer la fabrica, llegaba hasta lugar donde tantas veces había compartido momentos felices con Leticia, no pudo dejar de ir a la zona que tanto tiempo había sido motivo de sus inquietudes. Ese era el momento de salir de la duda y develar ese misterio que le perturbó tantos años. Remangándose los pantalones se introdujo en las heladas aguas del rio, luchando contra la corriente tratando de no resbalarse, cuidándose de las filudas piedras.
Llegó al lugar que conocía bien, la piedra redonda al pie del farallón, la zona empozada, la gran piedra que dividía el cause del rio en dos brazos que confluían mas abajo formando el interior un lugar de agua calmas.
Al principio nada sucedió, pero pronto vio burbujas alrededor de el, sintió que se hundía y comenzó a sumergirse hasta desaparecer completamente. No sintió miedo, estaba resignado a morir en el lugar.
Despertó en la orilla, había tragado mucha agua, una voz dulce le hablaba, cuando su vista se acostumbró a la luz pudo distinguir el rostro bello de Leticia, luego sintió el beso que la niña le daba. Sí, era ella, la que tanto amaba, estaba con él a pesar del tiempo.

sábado, 6 de marzo de 2010

EL VIGILANTE MILENARIO


Cada mañana al levantarme lo primero que veo desde mi ventana es el imponente volcán que custodia la ciudad, no puedo dejar de maravillarme de su presencia. Es cierto que muchas personas se han acostumbrado tanto a verlo que ya casi no les llama la atención; alguna que otra vez lo miran con cierta desconfianza para preguntarse algo así como: ¿y cuando éste nos dará la sorpresa?
Existen y existieron varias ciudades al pie de un volcán, de las que han desaparecido la mas recordada es Pompeya que fue arrasada al entrar en erupción el volcán Vesubio el año 79 D.C. Mas recientemente la ciudad de Armero en Colombia fue destruida por la explosión del volcán nevado Ruiz, que descargó toneladas de lodo sobre el poblado en 1985.
Tokio se encuentra cerca al que para muchos es el volcán mas bello del mundo: el monte Fuji, por cierto que el segundo volcán mas bello es el que custodia la ciudad de Arequipa, si, el nunca bien ponderado volcán Misti.
En realidad no debiera preocuparnos mucho el sufrir una catástrofe a raíz de una erupción volcánica ya que nuestra corta vida a comparación del tiempo geológico es probable que no nos permita ser testigos de un hecho trascendental y apocalíptico.
Subí al volcán Misti en siete ocasiones, debo reconocer que algunas el volcán me venció y no hice cumbre, pero las veces que llegué a la cruz que está en la cima fueron momentos que permanecerán guardados para siempre entre mis recuerdos mas preciados.
Decían algunos escépticos que los egipcios construyeron las pirámides por no tener montañas; la obra de la naturaleza es tan imponente y milenaria que las pirámides con sus 4000 años quedan como un suspiro en el tiempo, o un bebé de pecho comparado con los 800000 años estimados de antigüedad que este viejo volcán casi perfecto se erige, y que tal vez continuará mas allá de la propia humanidad. Y ni hablar de las dimensiones pues nada de lo que haya construido el hombre posee tal magnitud.
Desde el volcán, la ciudad de Arequipa se observa como un gigantesco espejo, quieto y silencioso. La ruta más transitada es por Gráficos en Alto Selva Alegre, saliendo por un cementerio de la localidad. Luego de internarse en las faldas ya se siente la influencia del coloso, el ambiente místico; comprendemos algo de lo que sentían los incas, el respeto y admiración que tenían al Apu, su fuerza milenaria. El volcán espera imperturbable, observa la ciudad más allá de su bulla y ajetreo. El sol sale por su cumbre y una sombra triangular se proyecta hacia el cono norte en la zona de Zamacola.
No se sabe exactamente desde cuando lleva el nombre de Misti, esta palabra se aplicaba a los descendientes de españoles. La escritora Franco peruana Flora Tristán cuenta en su novela “Peregrinaciones de una Paria” que su primo Altahus subió en una ocasión al “volcán” (ojo que no le llamaba Misti) y que el viaje era una odisea, varios cargadores indígenas habían muerto y en el cráter se veía fuego. Estamos hablando del siglo XIX a inicios de la república y el nombre de Misti no aparece al menos en esta novela.
Es seguro que los hombres prehispánicos lo conocían con otro nombre, y como otros Apus, era lugar de sacrificio, las momias y objetos encontrados dan fe de ello.
Si tienen algo de físico y una gran dosis de voluntad les recomendamos vivir esta aventura, ¿Qué mejor manera de conocer la ciudad que viéndola desde una atalaya natural?
Además subir al volcán, se convierte casi en una peregrinación religiosa, un reto para el cuerpo y espíritu.
Pasar un poco de hambre, frio y mucha exigencia física es parte de un sufrimiento que se ve recompensado con la tranquilidad espiritual de haber llegado a los 5824 m.s.n.m en una montaña sagrada.

lunes, 1 de marzo de 2010

Caso 5676







Ella estaba despierta casi todas las noches, mientras el esposo roncaba plácidamente.
El trabajaba de día en una fábrica de cemento, de noche roncaba sin parar.
Ella al principio soportaba estoicamente los ronquidos, pero poco a poco el ruido crugiente y burbujeante que producía la dificultosa respiración de su marido le fue alterando los nervios.
Hasta que un pensamiento se le fué pudriendo en el cerebro, cuatro años había soportado, pero era hora de poner punto final a esta insostenible situacion.

Por eso, cierta madrugada se levantó mas temprano, con los ojos vidriosos por la falta de sueño, fue a la cocina y preparó el brebaje que una hierbera le había enseñado y lo mezcló en el jugo de naranja.
Todo estaba listo para que su esposo no volviese a roncar nunca mas.

Ese fue mas o menos el tesmimonio que encontré en el atestado policial número 5676, sobre el caso de matricidio mas comentado en el pueblo.